Un abril del 2025 se suma a la condición de mes sangriento y luctuoso para la nación dominicana, precedido por el holocausto del 1965, teñido de revolución e intervención norteamericana, para recalar en la carnicería que representaron las matanzas durante las protestas contra el Gobierno por el alto costo de la vida tras la Semana Santa de 1984.

Este abril culminó como una caravana de la muerte. No fue solo la tragedia en la discoteca Jet Set que enlutó al país entero con el fallecimiento de por lo menos 232 personas dominicanas y de naciones hermanas. También hubo decenas de muertes en accidentes de tránsito y otros fenómenos durante la Semana Mayor, contra todas las exhortaciones elevadas por las autoridades y el liderazgo religioso para que esas celebraciones se realizaran con el mayor grado de prudencia.

Quien esto escribe estuvo entre los devastados por la misma guadaña, con el fallecimiento de mi hijo Frank Michael Núñez Rijo, que nos dejó un irreparable dolor junto a su madre Dinorah, familiares y amigos cercanos. La inesperada partida a los 39 años y meses fue producto de un infarto, que ahora ha estado causando estragos entre los jóvenes. La devoción cristiana del entorno social ha sido terapéutica ante la triste experiencia. Pero ciencias tan reputadas como la biología y la psicología destacan que el duelo es mayor cuando los hijos se adelantan a los padres en la inevitable partida de este mundo.

Junto a la fe religiosa ha contribuido con la tranquilidad espiritual la gran manifestación de solidaridad de los relacionados, entre los que figuran muchos colegas periodistas cuya lista es tan extensa que no cabrían en este espacio. ¡Gracias hermanos, amigos y colegas! De verdad que en momentos como los que han vivido las familias dominicanas aplastadas bajo las ruedas de la caravana mortal de este abril del 2025 es cuando se conoce cabalmente a las personas.

Las tragedias dejan sus lecciones porque prueban la autenticidad humana. La sinceridad y la falsía se reflejan nítidamente en estos momentos cruciales.

Posted in Cultura, El Libro Vive, Gente

Más de gente

Más leídas de gente

Las Más leídas